viernes, 18 de febrero de 2011

Mentir no vale, es trampa.


            La Verdad  aun  siendo dolorosa, día tras día nos da una patada en el culo de vuelta a la realidad,  una realidad en la que; todo el mundo miente, todo el mudo es malo y perverso, y nadie piensa en los demás, una realidad en que solo nos podemos fiar de uno mismo, en esa realidad cruel y que hace que solo pensemos como única salida el suicidio.
            Siempre en algún momento de nuestra vida, cuando esa Verdad te pega bien fuerte en tu ingenuo  trasero de adolescente es cuando empezamos a ser conscientes de que la realidad no es como la pinta Disney, si no que no hay ni príncipes azules, ni princesas dormidas esperando un primer beso de amor verdadero ni nada de eso…
            Y lo peor es que cuando te das cuenta de cómo de mal está el mundo, la sociedad o simplemente tu vida, es demasiado tarde para decir:
Eso no vale, es trampa.


miércoles, 9 de febrero de 2011

¿Amistad?

                Dulcemente, clavo la cuchilla en la piel olvidando me de las penas, de los problemas, de las discusiones, de mi mismo, del mundo entero.
                Mientras me desangro lentamente al ritmo de mis pulsaciones cada vez más lentas, escribo esta historia, para despedirme de ti, de la gente que aun así me importa.
                Pero de la verdad me doy cuenta tarde, cuando todo queda  negro, en absoluto silencio, y ya no siento nada. Me doy cuenta de que sí, he sido fuerte para terminar con todo, pero no merece la pena acabar con una vida por un par de problemas, con boca, piernas y brazos, pero al fin y al cabo, sin cerebro ni alma.
Y lo que más me duele es que mientras yo estoy aquí sufriendo, los problemas se regocijan en sus casas de tu pena, de tu dolor…
       Lo siento, de verdad, pero necesitaba desahogarme.
Gracias.

domingo, 6 de febrero de 2011

En un bosque muy, muy lejano...

       Me levanté con una gran sonrisa en la cara pensando minuto a minuto, segundo a segundo en tu voz, en ese olor a limón y tomillo,  en tu pelo, en tu cuerpo, en todo tú ser. Esperando el momento de reencontrarme contigo salgo de casa, hacia un futuro incierto; recorro los bellos paisajes del bosquecillo que me separa de la humanidad, trinos de pájaros, aromas de flores, todo me envuelve con esa dulce fluidez, todo es tan perfecto que parece mentira.
       Allí entre los árboles, tu figura se dibuja ante mí, lentamente… andamos el uno hacia el otro mientras nuestras miradas son incapaces de separarse. Por fin puedo verte con claridad, miles de lágrimas caen por tus grandes ojos azules. Levanto la mano, tu rostro refleja horror, te quiero tocar… todo se detiene, el corazón se acelera, la cabeza me da vueltas, a pocos segundos de tocarte apartes la cara, evitando el contacto.
       -El amor te consume, hasta tal punto que no puedes más…
       Aún ahora, después de mucho tiempo desde el momento en que te desvaneciste delante de mí, tus últimas palabras siguen flotando en el aire…

jueves, 3 de febrero de 2011

Hay momentos en la vida...




        Hay momentos en la vida en que tienes la oportunidad de elegir, elegir sin reproches, sin consecuencias, una elección "puramente" libre, y cuando llegue ese momento, sin duda escogerás el amor.
        Un amor verdadero, "puramente" sincero, un amor compartido con alguien en que confías.
Pero siempre llega el momento de las consecuencias, y ese alguien en el que basaste toda tu vida, te dirá con amarga melancolía; por todos esos momentos juntos, pero sin amor alguno; ADIOS, un adiós definitivo, y de tus ojos brotaran lágrimas de amor, un amor perdido, Y como sangre se precipitaran contra el suelo para ser olvidadas para siempre, junto al dulce recuerdo de esos días ya pasados.